La cena del 31 de diciembre es una de las más esperadas del año. Nos despedimos de todas las experiencias vividas durante el año y nos preparamos para comenzar un año aún mejor. Y para conseguirlo lo mejor es empezar con buen pie y unos cuantos trucos.
Organizar la cena de fin de año perfecta suele producir algunos quebraderos de cabeza y la mayoría de las veces quien prepara la cena no la disfruta tanto como los demás. ¡Este año tiene que ser diferente! No hay nada mejor que un anfitrión tranquilo y relajado que transmite glamour y seguridad a raudales.
Todo el mundo habla de decorar la mesa, y eso es muy importante, pero no escatimes a la hora de arreglarte tú. Quienes salen suelen arreglarse, pero los que se quedan en casa acaban primando la comodidad. Entre elegante e incómoda y cómoda en pijama/chándal esta el amplio abanico de ir elegante y cómoda. No renuncies a él. Será la mejor forma de comenzar el año.
Por otro lado, la decoración en la mesa puede ser muy sencilla. A veces nos pasamos con flores, servilletas con formas y mil historias y en ocasiones algo tan simple como un detalle en la comida o en la bebida puede ser mucho más significativo y menos aparatoso. Por ejemplo, dar un toque especial con las velas más seguras y especiales: son eléctricas, pero tan realistas que no podrás resistirte a presentarlas cada año sin pensar en los límites. Pueden tener cerca tela, papel, mascotas o niños que resitirán a todo gracias a su luz Led. Si han conquistado Hollywood y a los decoradores más exigentes, apostamos que te entusiasmarán
La cena de fin de año suele alargarse hasta casi casi las campanadas, pero eso no implica hacer platos muy elaborados y fuertes. Apuesta por platos ligeros que puedas tener preparados con antelación. Entrantes fríos fáciles de servir harán que la cena se desarrolle aún con más calma y comodidad. Además, una cena ligera es mucho mejor para bailar. 😉 Y no olvides mantener el vino bien fresquito y aireado para disfrutar toda la noche.
Elige una música variada. Seguro que sabes más o menos los gustos de tus invitados y como se suele decir, para gustos los colores, así que lo mejor es hacer una selección variada para que todos estén contentos y se arranquen a bailar. Eso sí, prepara tu equipo, tu lista de grandes éxitos y tus mejores altavoces
Ten a mano un sustituto de las uvas. No a todo el mundo le gustan, así que por si acaso puedes optar por gajos de mandarina o aceitunas y para los peques por gominolas.
Un elemento imprescindible junto con las uvas es el champan o cava. Es fundamental un buen champán, para brindar por el año que empieza y celebrar entre burbujas un buen inicio de año. De entre todos, este año nos quedamos con Dom Perignon. Un acierto siempre seguro por su elegancia y calidad.
No olvides que lo más importante es la temperatura a la que se sirven. Esa será la clave del éxito. 😉
Por último, la guinda del pastel, un toque de dulzura de la mano de exquisitos bombones y un postre delicioso. ¡Todos te lo agradecerán!
Si eres invitado, lo mejor es aparecer con un detallito, piensa que es lo último que le regalarán en el año. Así que tiene que ser algo impactante, alguna experiencia que proyecte ilusiones de cara al futuro y si puede ser lujoso, mejor que mejor.
Si además en la cena se encuentra algún Manuel o Manuela, definitivamente necesitas un detalle ¡Ellos comienzan el año celebrando su santo! Así que ¡felicidades a todos ellos y un feliz año cargado de salud, proyectos y muchos regalitos para todos!