¡Año nuevo, vida nueva! Del 1 al 7 de enero muchos le dan vueltas a la cabeza a una idea: Los propósitos de año nuevo para tener una vida mejor. Sin embargo, resulta que solo el 12% de las personas consiguen lo que se proponen. ¡Eso no puede ser! Así que hoy queremos ayudaros con algunos trucos para lograrlos fácilmente.
Lo primero es elegir sólo un propósito. Hacer una lista para los Reyes Magos está bien, ellos son Magos y pueden lograrlo todo o casi todo, pero si la lista es para nosotros lo mejor es seleccionar un sólo propósito y focalizarnos en él. Luego, cuando esté conseguido, podemos volver a nuestra lista y escoger el siguiente.
Uno de los primeros en esa lista es Dejar de fumar: quien dice fumar dice cualquier hábito poco saludable o adicción. Es uno de los propósitos más populares pero también el más difícil. Por eso con pensarlo mientras te comes las uvas no es suficiente. Hay que pedir ayuda. En enero los más optimistas se atiborran a parches y chicles de nicotina pero lo primero es pensar bien en nuestro propósito, tomar conciencia de para qué quieres cambiarlo y ponerse serio. Lo mejor es acudir a especialistas que nos puedan ayudar.
Adelgazar: normal tener este propósito en estas fechas entre las cenas familiares, los turrones, mantecados, polvorones, las nuevas creaciones de amigos aficionados a los cupcakes o cualquier programa culinario, las cenas de empresa y el roscón de reyes.La báscula ya ha sacado bandera blanca. ¡Dejar de comer a estas alturas no es un propósito, es una necesidad!
Si de todas formas, pasados unos días sigue siendo tu propósito principal, seguro también has barajado otro de los propósitos más comunes: Hacer ejercicio. En concreto apuntarse al gimnasio que suele estar hasta los topes enero y febrero. Lo mejor para conseguir cualquier propósito o reto es dividirlo en pequeñas metas y comprobar que son realizables y coherentes. Nuestro truco es infalible para ambos propósitos. Para eso Fit bit es fantástico. Te ayuda a ponerte en forma de forma suave y constante: subiendo escaleras, haciendo el ejercicio que somos capaces de realizar y controlando un poco nuestras comidas.
Otro de los propósitos es Ahorrar más. Lo mejor para conseguir este tipo de objetivos es cuantificar tus metas ¿Cuánto más concretamente? ¿En cuánto tiempo? Y mientras preparas un plan, utiliza una hucha. Un truco genial es decidir que todas las monedas de 2 euros que pasen por tus manos irán a la hucha. Si te dan las vueltas con monedas de 1 euro o de otro tipo seguirán en tu monedero y si son de 2 ¡a la hucha!
La hucha cerdito es fantástica porque puedes escribir tu meta y eso es fundamental. Es necesario escribirla (tu meta) donde puedas verla bien, en la hucha, o utilizar una imagen que siempre te recuerde tu objetivo y que esté bien visible. Escribe en el cerdito lo que deseas y será más fácil conseguirlo. Por ejemplo: Ir de vacaciones. Precisamente este es otro de los más recurrentes. Siguiendo con nuestro truco de visualizar, este mapamundi es genial. Puedes rascar los países visitados que cambiarán de color.
Pasar más tiempo con la familia: nuestro truco para este propósito es priorizar y reservar un tiempo, el que puedas: media hora, una hora o lo que puedas para estar con ellos y sólo con ellos. Si no dejarías con la palabra en la boca a tu jefe en una reunión laboral o al médico durante una consulta, no dejes con la palabra en la boca a tus hijos si te llaman por teléfono durante esa media hora. Nuestra recomendación: juegos en familia mientras tu hucha cerdito se llena y luego¡Disfruta de unas vacaciones en familia!
Por último Aprender algo nuevo, ya sea inglés, cocina, economía o baile, un libro siempre es el primer paso: documentarse y luego ponerse manos a la obra.
Sea cual sea tu propósito para este nuevo año, no olvides convertirlo en un reto divertido con el que disfrutar todo el año