Las vacaciones son sinónimo de relax, descanso, rumor de olas, brisa marina, refrescos, helados… Pero muchas veces acaban siento una ginkana de la que necesitamos recuperarnos. Hay quien tiene síndrome post-vacacional cuando ve que tiene que volver al trabajo, pero hay otros que lo que necesitan son unas segundas vacaciones para recuperarse de las primeras. Por eso, y para que las vacaciones sean todo placer y relax aquí están nuestros mejores trucos:
- Recupérate de las agujetas: Las agujetas son micro-roturas musculares, no son pinchazos en la musculatura producidos por la cristalización del ácido láctico como algunos creen, por lo que el agua con azúcar no ayuda mucho. Para prevenirlas lo suyo es progresar lentamente en nuestras capacidades y no darnos una paliza en algo que no hemos hecho en todo el año. Pero si ya no hay remedio, lo mejor es descansar, tomar alimentos ricos en magnesio (frutos secos, marisco, almejas, lácteos) y realizar ejercicios de baja intensidad: por ejemplo, si se han producido por correr mucho, da un paseo tranquilo. No realices estiramientos, pero sí puedes darte un masaje para ayudar a tus músculos.
- Supera la resaca: Las noches de verano, los mojitos, los margaritas y todos esos cócteles tan vistosos hacen que sea fácil acabar con una copa de más, por no hablar de fiestas, festivales… Si necesitas algún truco frente a la resaca, lo más importante es hidratar el cuerpo y reponer los líquidos perdidos con el alcohol. Un zumo de frutas y verduras natural además de ayudarnos a reponer las sales minerales que hemos perdido, nos dará un aporte extra de vitaminas para ayudar al hígado y los riñones, que están directamente involucrados en el procesamiento del alcohol. Y ojo, nada de tumbarse al sol en la playa. Descansar sí, pero bajo la sombrilla y con ropa blanca que refleja la luz, sino nuestro esfuerzo por hidratarnos se irá a pique
- Alivia tus quemaduras: ¿Querías ponerte moren@ y estás como una gamba arrocera? Esto es serio, la piel tiene memoria y recuerda todas las agresiones que va sufriendo hasta que ya no puede más y aparecen las consecuencias, así que no olvides las cremas con factor de protección cada vez que sales a la calle en verano, incluso si no estás en la playa. Para intentar mitigar las quemaduras hidratarse al máximo es básico: beber todo el agua posible, e incluso sumergirte en la bañera un ratito. Luego, no te seques con la toalla. Lo mejor es aplicar aloe vera natural sobre la quemadura tantas veces como necesites.
- Corta la diarrea: El chiringuito desconocido, la comida en viajes exóticos, las comilonas, la mayonesa… En verano nuestro estómago va sorteando obstáculos cada dos por tres. Si te has topado con algún plato que te ha sentado mal, mucho ánimo y opta por alguna de nuestras recomendaciones:
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Agua de arroz: uno de los remedios más conocidos y populares
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Manzanas asadas o cocidas
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Agua con zumo de limón: ideal para cortar la diarrea e hidratar nuestro cuerpo. Es una bebida alcalina que ayuda a reponer líquido y sales minerales para mejorar nuestra situación. No olvides poner media cucharadita de bicarbonato
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- Supera el mal de amores… veraniegos. En verano hacemos cosas distintas, estamos en lugares diferentes y conocemos a otras personas, y a veces… ¡Surge el amor! Los amores de verano son un must-have alguna vez en la vida, pero ¿Qué sucede cuando se acaban las vacaciones? Nuestra recomendación para superarlo rápidamente es escribir un diario. ¡Expresa tus emociones!. Escribir lo que has vivido te ayudará a desahogarte y a recordarlo con cariño siempre
- Robos en la playa: Hay quien te roba el corazón y hay quien te roba el móvil en la arena. Si quieres darte un chapuzón sin miedo a que te roben el dinero no te olvides este truquito. Un recipiente con forma de bronceador donde guardar todos tus objetos personales. ¡Nadie pensará que están allí! Y nadie roba el bronceador así que tus pertenencias estarán a salvo para que disfrutes al máximo mientras nadas 😉
¡Felices vacaciones!!