Es el regalo perfecto para todos los niños que necesitan un poquito de motivación a la hora de comer y que son muy, muy creativos con la comida. Si es de los que se come la carne y se deja las verduras, acabas de encontrar el plato con el que se lo terminará todo sin levantarse de la mesa.
El plato es toda una invitación a la creatividad. La cara dibujada en el fondo sirve para terminarse todo y rediseñar el personaje con los alimentos que van quedando. ¡Siempre hay que comerse algún detalle sobrante para que quede perfecto! Para ir afeitándole la barba de puré, tendrá que ir comiéndosela, así se acabará el plato hasta que solo le quede el bigote sin darse cuenta. ¡Las posibilidades son incalculables! Que odia los guisantes: pues hagamos un sombrero, luego pelo rizado, y así hasta que solo necesitemos 2 para los pendientes. Exprimirá su creatividad y estará tan entretenido que no se levantará de la mesa. Reconócelo, ¡a ti también te hubiera encantado!
Es bueno que sepas que...
Le encantará porque ahora no le podrás reñir por jugar con la comida, y podrá dar rienda suelta a su creatividad.