Es la solución de espacio para todos los que no quieren desprenderse de su botellita de agua, pero están hartos de cargar con ella sobre todo cuando está a la mitad y ocupa lo mismo que al salir de casa. Hemos encontrado la botella que cambia de tamaño dependiendo del líquido que lleves. ¿A que es fantástica?
Es reutilizable, flexible y muy, muy segura. Su diseño con triple pared de protección evita roturas o derrames y su capa interna es resistente a las manchas, no guarda olores ni sabores. Así que puedes llenarla un día de zumo, otro de agua, de té… Incluso de refrescos con burbujas
Cuando está llena se queda de pie como cualquier otra botella y cuando se va vaciando puedes aplastarla, doblarla y enrollarla para meterla en el bolso o en el bolsillo sin que ocupe espacio. Incluso tiene un práctico mosquetón para colgarla de tu bolsa y olvidarte de ella hasta que vuelvas a tener sed.
Es bueno que sepas que...
Sus prácticas funciones no acaban aquí: se puede meter en el lavavajillas
Tiene un espacio reservado para que escribas tu nombre o su contenido. Así no te equivocarás nunca más
Puedes meterla en el congelador y utilizarla como bolsa de hielo