Lo último este verano es llevar piñas. No, en la cabeza junto con los plátanos no. En el agua, tumbada sobre ella mientras te tomas un coctel de frutas tropicales espectacular y flotas en la piscina. Y para tumbarte cómodamente no vale una piña cualquiera, ni una colchoneta cualquiera. Tiene que ser, grande, enorme, para descansar, tomar el sol y relajarte como si veranearas en Los Hamptons. Por eso esta piña de casi dos metros nos parece perfecta.
¿Con quién triunfas seguro?
Con las personas más divertidas, cool y trendy que adoren la playa o la piscina.
Es un regalazo porque…
Es de un tamaño impresionante, es súper cómoda, divertida y, además, es lo más este verano.